Hoy me siento feliz y contento, quiero empezar a hablar sobre lo mucho que me interesan las personas y sus problemas, escucharlos representa para mi un placer inimaginable, parecido al de una tortura medieval, no debieron usar agujas calientes o caballetes en aquella hermosa época, debieron poner a una mujer a contarle los problemas al torturado, después de tres horas confesaría todo y pediría una muerte lenta y dolorosa a cambio de no seguir escuchando algo así...
Pero como saben, soy algo sadomasoquista, y el dolor es una faceta importante de la vida, es la vida misma, continuaré con mis entradas, estén pendientes, les dejo un recordatorio: no existir tiene sus ventajas, no tienes que preocuparte por lo que dices, no tienes sentido alguno de moralidad, y tú hígado no sufre las cantidades navegables de alcohol que consumes..
